sábado, diciembre 01, 2012

En las letras, desde Puerto Rico: Fragmentos para mis sobrinos (y para los que quieran leer)

por Carlos Esteban Cana


Confieso que siempre he querido dejarles un libro a mis sobrinos. Quizás con la esperanza de ahorrarles algunos tropezones en la vida. Un libro que incluya algunas reflexiones mías con citas de pensadores que considero importantes. Sin duda, es un proyecto que quiero llevar a su plenitud en algún momento. En un año como este, en que cierro, a mi entender, un ciclo e inicio otro, adquiere más significación una empresa como esta.
Así que comparto aquí, entre ustedes, algunos de los pensamientos que he ido recogiendo con el paso del tiempo. No sé cuales puedan figurar al final, en el contenido. Pero, pieza a pieza, vamos integrando este regalo que les quiero dejar a ellos y a quienes quieran leer. Por ahora es un sampler de ocurrencias propias e ideas que tienen cierto valor de diversas tradiciones religiosas y humanistas.
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Si yo hablara lenguas humanas y angélicas, pero no tengo amor, he llegado a ser como metal que resuena o címbalo que retiñe. Y si tuviera el don de profecía, y entendiera todos los misterios y todo conocimiento, y si tuviera toda la fe como para trasladar montañas, pero no tengo amor, nada soy.

1ra de Carta de San Pablo a los Corintios (Cap. 13)

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No es lo que ocurra, sino cómo uno reacciona a lo que está ocurriendo.

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Cuando pienso en tener fortaleza, en aquello que podríamos llamar dominar el miedo, siempre me viene a la memoria unas reflexiones de Rabindranath Tagore que dicen lo siguiente: “Permíteme no rezar para ser protegido de los peligros, sino para afrontarlos sin temor. Permíteme no rogar para que se aplaque mi dolor, sino para que el corazón lo conquiste. Permíteme no anhelar con angustioso temor el ser salvado, sino confiar en tener la paciencia para ganar mi libertad.”

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Los elementos exteriores, de alguna forma, son variables que a veces pesan, y en otras ocasiones no. Es algo a lo que más adelante debemos darle pensamiento. Pero, por otro lado, es importante considerar lo que opina el Dalai Lama sobre el tema:

“Uno de los mayores desafíos consiste en oponerse a las emociones perturbadoras hasta librarse de ellas definitivamente. La dificultad radica, sencillamente, en que las emociones perturbadoras nos han causado toda serie de tormentos desde el principio de los tiempos. Si alguien nos tiraniza y un enemigo nos persigue, gritamos contra ellos. Los enemigos exteriores, por muy brutales que sean, no pueden más que afectarnos en una sola vida. Las emociones perturbadoras, en cambio, son nuestros enemigos interiores y pueden causar estragos en nuestras vidas futuras. Son, de hecho, nuestros peores enemigos."

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Es importante tomar lo mejor de cada cultura; hacer una simbiosis, en estos momentos, del conocimiento de oriente y occidente, me parece razonable.

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Elizabeth Kubler-Ross, quien en vida hizo un paradigmático servicio a las personas que se encontraban en la fase final de la vida, en su autobiografía “La rueda de la vida”, señala lo que aprendió de esas personas que se encontraban moribundas. Resumió de esta forma innumerables lecciones en varios incisos:

Vive de tal forma que al mirar hacia atrás no lamentes haber desperdiciado la existencia.

 
Vive de tal forma que no lamentes las cosas que has hecho ni desees haber actuado de otra manera.

Vive con sinceridad y plenamente.

Vive.

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En medio del camino de la vida,

Errante me encontré por selva oscura

En que la recta vía era perdida. 

Así comienza el poeta florentino Dante Alighieri La Divina Comedia, versos que me sirven como pretexto para tocar el tema acerca de las diversas crisis que enfrenta el ser humano en su existencia.

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Nada humano me es ajeno.

Terencio

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Ahora quiero hacer referencia a un libro sencillo, no muy extenso. El mismo es una invitación a profundizar en temas, que por su naturaleza cotidiana, en ocasiones pasamos por alto. Y quizás por eso la frescura de ese pequeño libro. Si encuentran “Encuentros con Morrie” de Mitch Albom, no pierdan la oportunidad de leerlo.

 
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Harold Bloom, acerca de Hamlet, dice: “El príncipe profetiza los límites con que topamos cuatro siglos más tarde, cuando cualquiera de nosotros comprende que incluso un conocimiento enorme de la propia conciencia es casi inútil para conocer lo que no es consciente, ese misterio que deja la voluntad estupefacta”.

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Michael de Certau dice que el consumo cultural es en sí mismo una producción, una producción silenciosa, diseminada, anónima, pero una producción al fin.

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La luz, espejo espiritual, no es más que una emanación del origen del ser mediante la cual percibimos la oscuridad del caos.
 

En La Enseñanza sin palabra

Kristofer Schipper

El cuerpo taoísta

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Soy feliz con la ventura ajena, intento que desaparezca el sufrimiento en todos los seres, y este sentimiento de simpatía universal respecto a la suerte de mis hermanos me ha mantenido vivo y juvenil a través de los tiempos.
En la adversidad, me quedo imperturbable como una roca, y en la prosperidad, soy benévolo para con todos. Ni la pobreza ni la opulencia me afectan, y esa firmeza de alma es la causa de mi inextinguible longevidad.

Décimotercera conversación


El mundo está en el alma

Valmiki

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El Zhuangzi dice que los que no saben administrar lo cotidiano nos recuerdan al eremita que vivía muy santamente en las montañas y que a los setenta años tenía aún la apariencia de un niñito pero, desgraciadamente, se encontró un día con un tigre hambriento que lo devoró.

¡Pobre eremita! ¡Estaba tan preocupado por su interior que dejó que el tigre se comiera el exterior! Hay que cuidar los dos.

La enseñanza sin palabras

En El cuerpo Taoísta



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Sabiendo lo que se sabe, alimentar lo que el saber no llega a conocer, y terminar los años del Cielo, evitando morir prematuramente a medio camino. Este es el conocimiento más elevado.

Pero hay un problema: el conocimiento necesita un apoyo para poder aplicarse a cualquier cosa, y este apoyo nunca es estable ni fijo. ¿Cómo estar seguro, entonces, de que lo que llamo el Cielo no es el ser humano, o de lo que llamo el ser humano no es el Cielo? Hay que ser un Hombre Verdadero antes de tener este conocimiento de lo real.

El Hombre Verdadero de antaño podía entrar en el agua sin mojarse,

atravesar el fuego sin quemarse

y su respiración era profunda.

¡Profunda!

El Hombre Verdadero

respira por los talones.

La enseñanza sin palabras

En El cuerpo taoísta

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Los que saben no hablan, los que hablan no saben.

El sabio practica la enseñanza sin palabras.

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Hay que saber vivir solo para poder sobrevivir entre los demás.

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Bibliografia



La Biblia

Elizabeth-Kubler Ross, La rueda de la vida, Ediciones B. S. A, 2000

Dalai Lama, La meditación paso a paso, Ed Grupo Editorial Random House Mondadori, 2006

Joan Borysenko, Fuego en el alma, Ediciones Obelisco, 2da edición, junio 1997

Roger Chartier, Las revoluciones de la cultura escrita (Diálogo e intervenciones), Editorial Gedisa, noviembre del 2000

Harold Bloom, Cómo leer y por qué, Editorial Anagrama, S. A., 2007

Mitch Albom, Encuentros con Morrie, Editorial Norma, S. A., 1998

Kristofer Schipper, El cuerpo taoísta, Ediciones Paidós Ibérica S.A., 2003

Valmiki, El mundo está en el alma, Ediciones de la Tradición Unánime, 1994
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Carlos Esteban Cana Escritor y comunicador puertorriqueño. Ha cultivado el cuento, el micro cuento, y la poesía. Actualmente, sin embargo, se ocupa de darle forma a sus dos primeras novelas y a un volumen de ensayos. Colaborador de varias publicaciones impresas y cibernéticas, en Puerto Rico y otros países. Bitácoras y publicaciones alrededor del planeta, como Confesiones, del narrador Angelo Negrón, reproducen su boletín "En las letras, desde Puerto Rico".
Para el periódico cibernético El Post Antillano también publica su columna "Breves en la cartografía cultural". En verano del 2012, Carlos Esteban publica Universos, libro de micro-cuentos bajo el sello de Isla Negra Editores. Otros dos libros aparecerán durante el presente semestre. El primero titulado "Catarsis de maletas: 12 cuentos y 20 años de historia", ofrece una vista panorámica de una pasión que el autor ha desarrollado, por cuatro lustros, en el género del cuento. "Testamento" es el segundo de los libros mencionados, poemario antológico que reúne lo más representativo de su poesía; género del que Cana manifiesta: "Fue la propia poesía que me seleccionó como medio, como intérprete". Cana es conocido además por haber fundado la revista y colectivo TALLER LITERARIO, que marcó la literatura puertorriqueña en la última década del siglo XX en Puerto Rico.

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