En Puerto Rico se
lee mucho, mucho periódico. Hojas Sueltas pretende servir de foro para quien
sea que quiera publicar—para el estudiante con ansias, para el profesor
agobiado, para la abuela niñera, para el doctor desenfocado, para el custodio
sonriente, para el escritor frustrado. En cada luz, en cada esquina, en cada
gasolinera y farmacia y supermercado y oficina—en todo rincón de la isla debe
haber literatura, la vida hecha arte en blanco y negro, en vivo y a todo color.
No discriminamos por orientación sexual, religión, raza,
clase social, inclinación política, origen, edad, etcétera. No especificamos ni
tema ni longitud. No eliminamos ni borramos ni robamos ni devolvemos. Si lo que
sometes es de calidad, tienes privilegio en nuestro espacio. Ya es tiempo de
traerle foco a las voces que no se escuchan.
Seremos una voz reconocida y respetada. Abriremos una
ventana para los autores—veteranos y novatos—cuyos textos no han visto la luz
pública. Construiremos puentes entre el canon literario y la voz de la calle.
Meteremos por ojo-boca-nariz el gusto por leer y por ver nuestro mundo de
manera alternativa.
Arte y cultura produce cambio social. Ese es nuestro norte.
Lo que tienes es tiempo; lo que no tienes es excusa. El único
obstáculo eres tú, lector. Sí, tú.
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