El impacto brutal del psicoanálisis: conversación con Alfredo Carrasquillo-Ramírez
(1ra parte)
por Carlos Esteban Cana
Durante los pasados dos años, el catedrático y escritor Alfredo
Carrasquillo-Ramírez, ha estado muy activo ofreciendo seminarios y
conferencias. Destacan, entre tales actividades, su participación en las Jornadas de Puerto Rico y el Caribe de
la Universidad Metropolitana en noviembre del 2014. Allí ofreció la conferencia
El miedo en la cultura política
puertorriqueña, una perspectiva psicoanalítica. Casi un año después, entre
octubre y noviembre del 2015, ofreció en la Universidad del Sagrado Corazón un
seminario titulado “Invitación al Psicoanálisis”. En esa ocasión, una centena
de profesionales de la salud integró la audiencia que se dio cita en el Teatro
Arturo Morales Carrión. En tal escenario Carrasquillo-Ramírez compartió su visión
y experiencia de 25 años de formación psicoanalítica que le ha llevado a viajar
a diversos países de América, Europa y África, y participar de seminarios
internacionales junto a conocidos psicoanalistas como Colette Soler, Jaques
Alain Miller y Slavoj Zizek, entre otros.
En esta
edición especial de “En las letras, desde Puerto Rico” y como parte de la serie Conversaciones fragmentadas, traemos a nuestros lectores una muestra del
pensamiento de este psicoanalista puertorriqueño. Las reflexiones aquí
presentadas fueron tomadas de una entrevista que Carrasquillo-Ramírez nos
concedió en el 2014. Agradecemos al narrador Angelo Negrón la publicación de
esta primera parte en Confesiones.
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Alfredo
Carrasquillo-Ramírez: El gran desafío que el psicoanálisis plantea es cómo todo
ser humano se vincula al lazo social. Es decir, cómo todo ser humano se vincula
a los otros porque obviamente somos seres de lenguaje, que estamos conectados
con los demás, vinculados, atados al universo simbólico con los otros. Y ese
universo simbólico, ese lenguaje, no es igual a sí mismo en todas las épocas,
sino que está marcado al malestar de la cultura, está marcado por las
civilizaciones. Y en ese sentido cada contexto histórico, en su dimensión
política, económica, cultural en un sentido amplio, plantea unos desafíos y en
nuestros tiempos hay una serie de desafíos. La llamada mundialización plantea una
serie de desafíos para los seres humanos que no son los mismos de la modernidad
o de la antigüedad. Y el psicoanálisis tiene que
dar cuenta de esas nuevas modalidades del malestar de la cultura. Un ejemplo:
Michael Neumann, un psicoanalista francés muy famoso, lo abordaba hace años en
un libro importante. Él decía:“Cuando el psicoanálisis inicia, cuando Freud
inicia sus trabajos es en un contexto de la sociedad victoriana, un contexto de serias y profundas represiones”. Así que el gran desafío de los psicoanalistas
era lograr que la gente se librara de toda esa represión y se permitiera el
placer, y se permitiera gozar, y se permitiera una relación menos represiva con
su propio cuerpo y con el cuerpo de los otros. Hoy el desafío del psicoanálisis
no es ese. El desafío del psicoanálisis es que la sociedad lo que celebra es el
gozo desenfrenado, es el exceso. De alguna manera caímos en el otro extremo. Y
eso no es una invitación para que el psicoanalista se convierta en un policía
ni un represor de los cuerpos, pero sí plantea que cuando el ser humano se va
un poco por la chorrera del goce excesivo queda atrapado en la pulsión de
muerte. Y queda atrapado en el riesgo de convertir a los otros en objeto de su
goce y no verlos como sujetos con los que mantener una relación digna. Así que
los desafíos hoy son bien distintos a los desafíos de comienzo del siglo XX o
de finales del siglo XIX. El Psicoanálisis tiene que adaptarse a los tiempos.
Sobre el inconsciente
Yo
no asocio el inconsciente con enajenación. De hecho, una de las grandes
contribuciones que hace Lacan desde los años 30 pero sobre todo desde la
segunda mitad del siglo XX es mostrar que la enajenación del sujeto está del
lado de su yo, está del lado de la conciencia porque el yo y la consciencia
están sometidos al orden social y al orden económico y a las regulaciones
culturales. Y el inconsciente pasa a ser el mejor amigo del sujeto porque es el
que insiste con esas dimensiones más profundas y más auténticas del ser humano
que buscan la vía de expresarse a través de los que vamos a llamar nuestro
deseo inconsciente. Y parte de la travesía de un proceso de análisis es que el
sujeto pueda ir produciendo esas desidentificaciones, desarmando, deshaciendo
todas esas capas imaginarias que lo mantienen atado a la obediencia, a las
demandas parentales y a las demandas de los otros, y enfrentarse al vacío que
deja deshacer todo eso y plantearse entonces qué quiero hacer con mi vida, cuál
es el deseo que me guía, qué quiero responder. Y ahí el inconsciente no es una
ruta de enajenación sino de verdad en el sentido psicoanalítico, de encontrarse
con lo más íntimo en ti, que es lo que te va a ayudar encontrar una salida o ética
o estética, una salida de producción y de creación, de modo que hagas de tu
vida lo que Freud llamaba hacer de tu vida una obra de arte.
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La segunda parte de esta edición de En
las letras, desde Puerto Rico dedicada al pensamiento del psicoanalista
Alfredo Carrasquillo-Ramírez está disponible en el blog Buscando luz al final del túnel pulsando El impacto brutal del psicoanálisis: Conversación con Alfredo Carrasquillo-Ramírez (2da parte)
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Carlos Esteban Cana Escritor y comunicador puertorriqueño. Ha cultivado el cuento, el micro cuento, y la poesía. Actualmente, sin embargo, se ocupa de darle forma a sus dos primeras novelas y a un volumen de ensayos. Colaborador de varias publicaciones impresas y cibernéticas, en Puerto Rico y otros países. Bitácoras y publicaciones alrededor del planeta, como Confesiones, del narrador Angelo Negrón, reproducen su boletín "En las letras, desde Puerto Rico".
Para el periódico cibernético El Post Antillano también publica su columna "Breves en la cartografía cultural". En verano del 2012, Carlos Esteban publica Universos, libro de micro-cuentos bajo el sello de Isla Negra Editores. Para el 2013 publica su libro Testamento. Testamento es un poemario antológico que reúne lo más representativo de su poesía; género del que Cana manifiesta: "Fue la propia poesía que me seleccionó como medio, como intérprete". Cana es conocido además por haber fundado la revista y colectivo TALLER LITERARIO, que marcó la literatura puertorriqueña en la última década del siglo XX en Puerto Rico.
Otro libro aparecerá durante el presente semestre: Titulado "Catarsis de maletas: 12 cuentos y 20 años de historia", ofrece una vista panorámica de una pasión que el autor ha desarrollado, por cuatro lustros, en el género del cuento.
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