miércoles, noviembre 13, 2024

En las letras, desde Puerto Rico: Vida, obra y trayectoria de Daniel Torres Rodríguez

 por Carlos Esteban Cana


Daniel Torres Rodríguez

Poemas para leerse en la calle es el libro más reciente del escritor boricua Daniel Torres Rodríguez. Ante tal acontecimiento editorial que llega a los lectores bajo el sello Isla Negra Editores, hemos conversado con este poeta, narrador y académico puertorriqueño que nació en Caguas en 1961 y enseña en la Universidad de Ohio desde 1990. Catedrático de español y estudios latinoamericanos, su investigación se ha centrado en la poesía colonial y contemporánea de las Américas. También ha estudiado y publicado libros sobre el lenguaje poético en la novela Cien años de soledad de Gabriel García Márquez, la antipoesía conversacional del escritor mexicano José Emilio Pacheco, la poética del Barroco de Indias, y el verbo y la carne de la poesía gay hispanoamericana. Su amplia bibliografía abarca la poesía, el cuento, la novela y el ensayo, vasta obra por la que ha recibido galardones importantes como el premio Letras de Oro de la Universidad de Miami o los que otorga el Pen Club de Puerto Rico en varias ocasiones. Algunos de sus libros son: Cabronerías: Historias de tres cuerpos (Isla Negra Editores, 1995);  Conversaciones con Aurelia (Isla Negra Editores, 2007); debellaquerías (Isla Negra Editores, 2009); La isla del (des)encanto: apuntes sobre una nueva literatura boricua (Isla Negra Editores, 2015); y Páramos del amor: Escrituras del VIH y sida en la poesía puertorriqueña (Editora Educación Emergente, 2023). A continuación la entrevista que Daniel me concediera. Mis preguntas en rojo y sus respuestas en blanco.

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Daniel, empecemos por lo básico: ¿cuáles fueron los primeros libros que disfrutaste como lector?

Daniel Torres Rodríguez

Te diría que fueron los libros de poemas de José Gautier Benítez, Julia de Burgos y José Ángel Buesa. Yo crecí en una casa sin libros, sólo la Biblia y varias enciclopedias aparte de los periódicos La Semana y El Imparcial. Eso y los libros de la escuela además de las novelitas de Julio Verne que me compraba en el supermercado mi papá adoptivo, Papi Chente. Ya cuando entré en la universidad para estudiar Estudios Hispánicos y Literatura Comparada pude acceder a todo un corpus tanto canónico como contra canónico que me fue formando como investigador y escritor o aprendiz de “escritor”.

¿Cuándo decidiste que tu vocación era ser escritor?

En los talleres de poesía de Beatriz Berrocal de Iranzo y María Arrillaga aprendí a elaborar los textos, pulirlos o “plancharlos” como decíamos en el Taller 1981 dirigido por María en la Facultad de Estudios Generales de la Universidad de Puerto Rico. Ahí me di cuenta que aquella inquietud de mi adolescencia (empecé a guardar libretas donde esbozaba poemas en 1975, a los catorce años) tenía un propósito. Ya después fui tomando conciencia que quería seguir escribiendo porque tenía cosas que quería decir.

De un modo u otro has explorado la experiencia de la comunidad LGTBQ+... ¿puedes hablarnos de cómo fue recibida tu obra entre los lectores y entre los escritores de tu generación?

Daniel Torres Rodríguez
Desde el principio mi identidad como hombre homosexual o gay fue lo que fue perfilando mis letras. Desde los talleres que mencioné antes siempre los poemas eróticos o lo que ahora llamo “pornopoemas” fueron parte integral de mi propuesta poética. Mi primera novela corta, Morirás si da una primavera (1993) ganó el Premio Letras de Oro 1991-1992 que daba la American Express a las obras escritas en español en Estados Unidos con un pago de $2,500 dólares. Y en ese experimento narrativo abordé el tema del VIH y sida en la comunidad latina o Latinx de Estados Unidos y la diáspora boricua. De 254 novelas que compitieron para el premio, Morirás… lo ganó así es que a juzgar por eso creo podría decir que mi obra fue “bien recibida” por el jurado. A lo largo de los años, de 1985 a 2023, que he publicado ya unos veintisiete libros de ensayo, poesía, cuento, novela corta y crónica, mis colegas escritores y quienes han leído mis libros los han apreciado a diferentes niveles tanto en Puerto Rico como en el extranjero.

Escritores como René Marqués, Manuel Ramos Otero, Abniel Marat, Nemir Matos, Lilliana Ramos Collado, Benito Pastoriza Iyodo, entre otros también han presentado en su obra las vicisitudes del hombre homosexual o la mujer lesbiana... ¿sientes que tu obra es parte, digamos, de un linaje dentro de la literatura puertorriqueña?

Daniel Torres Rodríguez

No sé si se podría decir que pertenezco a “ese linaje” como le llamas, pero sí que los he leído. He escrito sobre las obras de Manuel y Nemir. A los otros los conozco porque son parte de un canon. Mi exposición a la literatura de la generación de los años 1970 fue fundamental. Ésta es una de las más brillantes generaciones de la literatura puertorriqueña, muchos de sus integrantes fueron mis profesores en la UPR, y eso me marcó para siempre. Las obras de Luis Rafael Sánchez y Magali García Ramis, Ana Lydia Vega, Carmen Lugo Filippi y María Arrillaga, por ejemplo, la ensayística de Efraín Barradas y Juan Gelpí, todos estos nombres escogidos al azar han sido mis modelos a aspirar. Siempre he dicho que “cuando sea grande” me gustaría escribir como ellos.

¿Cómo fluye el escritor Daniel Torres con el Dr. Daniel Torres? ¿Los saberes académicos suman al poeta, al narrador?

Daniel Torres Rodríguez
Siempre digo que son dos sombreros, el de maestro de español, literatura y crítico literario y cultural y el de aspirante a “escritor”. Uno informa al otro. Porque para escribir hay que leer e investigar y para ensayar ideas en el papel hay que haber leído. Uno de mis editores, el poeta Carlos Roberto Gómez Beras, me lo resolvió con mi nombre de pila: Daniel Torres Rodríguez (el que publica ensayos (c)académicos y el nombre con el que he publicado la mayoría de mis libros de ficción: Daniel Torres. Pero ambos son la misma persona en dos instancias. A la hora de sentarse a escribir uno ayuda al otro y viceversa. Esos “saberes (c)académicos” han tendido un puente entre los dos Danieles para mantenerlo productivo siendo siempre lo más crítico posible de ambos discursos, el creativo y el (c)académico. Y lo digo así, (c)académico como una manera irreverente de no darse demasiada importancia con esos “saberes”.

¿Qué ha sido útil para tu formación como escritor? ¿Qué ha fortalecido al poeta? ¿Qué ha incrementado las capacidades del narrador?

Daniel Torres Rodríguez

Enseñar literatura, preparar las clases, estudiar y aprender con mis estudiantes en el día a día a todos los niveles tanto en cursos de gramática española, los famosos cursos de “Me llamo es” (así mal traduce el estudiante estadounidense “My name is”), de conversación y composición, de introducción a los géneros literarios, de poesía, de narrativa, de teatro, de civilización y cultura, de literatura colonial o virreinal hispanoamericana de 1492 a 1905, de literatura del Siglo de Oro Español, los seminarios sobre el Barroco y el Neobarroco, etc. Tanto el poeta como el narrador se han nutrido de las lecturas de estos cursos que como docente me ha tocado impartir por los últimos cuarenta años. Y sobre todo vivir y viajar porque hay que experimentar la vida bien y mal vivida para poder entender las instancias que evoca toda la literatura. Otro aspecto es la observación y la lectura también de todo aquello que va más allá de lo (c)académico como las revistas, los periódicos, las redes sociales, el arte, la música y demás. Todo esto es parte de lo que nos forma y deforma.

En esa misma dirección, ¿cómo comparas el proceso creativo cuando escribes poesía con el que se da cuando escribes narrativa?

Uno informa al otro porque mi poesía es narrativa y mi narrativa es poética. Los recursos de uno y otro se traslapan. El proceso creativo así como el de la elaboración de ensayos de crítica literaria cultural y reseñas de libros creo que es el mismo. Hay una filigrana particular que busca hilvanar los textos como si fueran tejidos y pulirlos, corregirlos, descartarlos o retomarlos. Eso es parte de la actividad o del ejercicio de escribir. También hay que dejar reposar los manuscritos porque no todo lo que se escribe se publica. Hay que tener buen tino y olfato para saber lo que se debe quedar en la gaveta o en los cartapacios del escritorio de tu computadora ahí mirándote cada vez que la prendes.

La obra literaria y académica de Daniel Torres ha estado muy presente en el panorama literario boricua durante las pasadas tres décadas... ¿Qué ha representado ese logro ante la situación de vivir fuera de Puerto Rico, por tu trabajo en universidades de Estados Unidos?  

 

Daniel Torres Rodríguez
Eso no lo sé. Yo me fui de Puerto Rico en 1984 y aunque vuelvo con frecuencia nunca más volví a vivir en la isla. Agradezco profundamente estas preguntas […], pero no podría decir lo que ha representado para mí “ese logro” de estar presente en el panorama boricua durante las pasadas tres décadas porque apenas lo sé. Vuelvo para ver a la familia y a las amistades, presento libros en librerías, tertulio con colegas, me mantengo informado de lo que se publica en la isla, en la medida de lo posible a través de las tres o cuatro editoriales donde he publicado, aunque primariamente en Isla Negra Editores, y últimamente en la Editorial Gnomo y Editorial Educación Emergente. Estoy al tanto de sus catálogos, pero no te puedo decir a ciencia cierta cuál ha sido “ese logro”. Mantenerse vigente puede ser tal vez parte de mi trabajo como investigador publicando ensayos como Páramos del amor: escrituras del VIH y sida en la poesía puertorriqueña (2023) que ha sido mi último libro. He enseñado en Stony Brook, University of Cincinnati, The Ohio State University, la Universidad Autónoma de Yucatán y Ohio University desde 1984 hasta 2024 y tal vez esa labor de cuarenta años de docencia ininterrumpida me ha dado una proyección tanto de la literatura como de la cultura puertorriqueña, porque donde quiera que nos paramos siempre somos y seremos boricuas plantando nuestra bendita bandera de la estrella solitaria.

¿Qué te ocupa en estos momentos? ¿Algún próximo poemario? ¿Alguna nueva novela?

Daniel Torres Rodríguez

Ahora me ocupa la jubilación. Este año pude jubilarme y es una nueva aventura para mí. Cuando llegue el otoño, o finales de agosto, y no tenga que entrar a un salón de clase para enseñar creo que entonces y sólo entonces me caerá el 20 (como dicen en México lindo y querido) y sabré cuál será mi ocupación más allá de la docencia: seguir leyendo y escribiendo en una licencia sabática permanente. Mi próximo poemario será la edición puertorriqueña de un libro que se publicó en la Editorial de la Universidad de Yucatán en 2018. Poemas para leerse en la calle y otros poemas será mi próximo poemario que es una reedición revisada y aumentada de la edición mexicana o yucateca. Como la primera se publicó en una colección de literatura juvenil para lectores de escuela superior, se suprimieron varios “pornopoemas” que ahora forman parte de la nueva edición además de otros poemas que he escrito de 2018 a 2024. En ese sentido será un libro diferente. Tengo también en preparación una colección de cuentos satíricos a titularse Confesiones de un Chacón dancer y otros cuentos de vedette y en la Editorial Gnomo se está preparando una “dragalogía” o la publicación de mis tres novelas cortas sobre dragas o Drag Queens: Morirás si da una primavera, Conversaciones con Aurelia y Lucy, tú qué sabes, traducidas al inglés en una sola edición. Y otro proyecto en proceso es La historia de Cholito que se trata de contar la historia de mi niñez, de Cholito, ese niño que fue adoptado, abusado sexualmente, rechazado, aunque muy amado por sus cuatro familias, en un intento de sanación a través de la escritura. Se trata de cuidar al niño que fuimos y abordar a través de esa escritura elementos suprimidos por muchos años de lo que fue crecer entre 1961 y 1971 en el Caguas que me tocó vivir. Contarme a través de las historias familiares. Dos capítulos como avances se han publicado en la Revista CRUCE como una asignación que me regaló la escritora Alexandra Pagán Vélez y con ella me hizo tomar conciencia que tenía que contarme a través del niño que fui.

 

Si algún lector lee esta entrevista y se interesa por acercarse a tu obra... ¿Cuáles libros les recomendarías para iniciar esa travesía en tus letras?

Daniel Torres Rodríguez
Les recomendaría de poesía En (el) imperio de (los) sentidos: Poesía (in) completa 1981-2021, de narrativa Mariconerías: Escritos desde el margen aunque aparte de cuento y crónica tiene poemas porque es un libro híbrido y Lucy, tú qué sabes/Lucy, the Hell You Know y de ensayo de crítica literaria La isla del (des) encanto: apuntes sobre una nueva literatura boricua. Creo que estos libros le puede picar la curiosidad a quien quiera adentrarse en el garabato de mis palabras.

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Libros publicados por Daniel Torres Rodríguez


Los versos inéditos del coronel Aureliano Buendía rescatados del discurso narrativo en Cien años de soledad. Santiago de Chile: Ediciones del Maitén, 1985. (65 pages)

La identidad cultural de Hispanoamérica: Discusión actual, in collaboration with Jaime A. Giordano. Santiago de Chile: Ediciones del Maitén, 1986. (221 pages)

José Emilio Pacheco: Poética y poesía del prosaísmo. (1991 Winner of the PEN Club of Puerto Rico Book of the Year Award in the category of Literary Criticism) Madrid: Pliegos, 1990. (124 pages)

Morirás si da una primavera (1992 Winner of "Letras de Oro" in the category of original novel) Miami: Iberian Studies Institute, 1993. (78 pages)

El palimpesto del calco aparente: Una poética del Barroco de Indias. New York: Peter Lang P, 1993. (124 pages)

Cabronerías: Historias de tres cuerpos. San Juan: Isla Negra, 1995. (65 pages)

Los siete poemas de Cariño . New York: La Candelaria, 1995. (15 pages)

FUSILADO dios. San Juan: Isla Negra, 2000. (55 pages)

En filigrana: Ensayos sobre poesía colonial y contemporánea en Hispanoamérica. San Juan: Plaza Mayor, 2002. (158 pages)

Invasión de ternura: diecinueve poemas de amor y distancia. New York: La Candelaria, 2004. (23 pages)

Verbo y carne en tres poetas de la lírica homoerótica en Hispanoamérica. Santiago de Chile: Cuarto Propio, 2005. (153 pages)

Mariconerías: Escritos desde el margen. San Juan: Isla Negra, 2006. (89 pages)

La poesía en la literatura española y latinoamericana de Garcilaso de la Vega a José Emilio Pacheco. Madrid: Pliegos, 2007. (236 pages)

Conversaciones con Aurelia. San Juan: Isla Negra Editores, 2007. (115 pages)


De bellaqueras. San Juan: Isla Negra Editores, 2009. (80 pages)


Diálogos en contrapunto: Conversaciones en torno a la obra de Joaquín Bestard Vázquez. Edited by Daniel Torres and Margaret Shrimpton. Mérida, México: Ediciones de la Unviversidad Autónoma de Yucatán, 2011. (184 pages)

“Dulce canoro cisne mexicano”: La poesía completa de Carlos de Sigüenza y Góngora.

Edición, introducción y notas de Daniel Torres. Barcelona: Paso de Barca, 2012. (244 pages)

En (el) imperio de (los) sentidos: Poesía (in) completa 1981-2011. San Juan: Isla Negra, 2013. (178 pages)


Morirás si da una primavera. San Juan: Isla Negra, 2014. 20th Year Anniversary Edition (75 pages)

José Emilio Pacheco o las voces subalternas de una poesía de las cosas. Madrid: Mundi Book Ediciones, 2015. (183 pages)

La Isla del (Des)encanto: Apuntes sobre una nueva literatura boricua. San Juan: Isla Negra, 2015. (185 pages)

Cabronerías: Historias de tres cuerpos. San Juan: Isla Negra, 2016. 20th Year Anniversary Edition (80 pages)

Conversaciones con Aurelia. San Juan: Isla Negra, 2017. 10th Year Anniversary Edition (126 pages)

Poemas para leerse en la calle. Mérida, México: Editorial de Universidad Autónoma de Yucatán, 2018 (88 pages)

Debellaqueras y otros pornopoemas. 10th Year Anniversary Edition. San Juan: Editorial Isla Negra, 2019. (105 pages)

Fusilado dios. 20th Year Anniversary Edition. San Juan: Editorial Isla Negra, 2022. (73 pages)

Lucy tú qué sabes/Lucy, the Hell You Know! San Juan: Gnomo Literario, 2022. (155 pages) (Novel)

Páramos del amor: Escrituras del VIH y sida en la poesía puertorriqueña. Cabo Rojo: Editora Educación Emergente, 2023. (156 pages)

Antología de narrativa LGBTQ+ escrita en español en Estados Unidos y Puerto Rico. Chicago: Ars Communis Editorial, 2023. (295 pages)

sábado, noviembre 02, 2024

Carta abierta a la cineasta Margarita Aponte Rivera desde la Asociación de Documentalistas de Puerto Rico



Hoy, reconocemos el trabajo y la dedicación de Margarita Aponte con nuestra Asociación, y aquí le dedicamos una carta abierta.

A Margarita,

Es un honor para nosotros dedicar unas palabras de reconocimiento y agradecimiento a la labor y compromiso de Margarita Aponte con AdocPR. Desde aquel día de febrero en que se fundó nuestra organización en un pequeño local de comida en Puerto Rico, Margarita ha sido una presencia constante y fundamental en nuestro camino. Su dedicación rigurosa y su incansable trabajo han sido pilares en el desarrollo de un proyecto que no solo representa al cine documental y a sus trabajadores, sino que también ha promovido una visión de país desde donde el cine documental se valore como un ente unánime y autónomo, merecedor de organización y apoyo.

A lo largo de estos 14 años, Margarita ha demostrado un compromiso inquebrantable, participando activamente en numerosos comités y llevando a cabo las muestras itinerantes, las cuales han crecido exponencialmente bajo su liderazgo. Además, ha sido miembro de la junta en más de dos ocasiones, y su asunción como Administradora de la Organización ha sido crucial para asegurar la transparencia y la buena administración de nuestros fondos y proyectos. Su capacidad para gestionar recursos y su compromiso con el cumplimiento de nuestros objetivos han sido vitales para el crecimiento y la estabilidad de AdocPR.

Agradecemos a Margarita no solo por su dedicación, sino también por su pasión y su visión. Su contribución ha dejado una huella indeleble en nuestra organización y en el panorama del cine documental en Puerto Rico. Estamos orgullosos de contar con ella en nuestra familia como miembro y esperamos seguir trabajando juntos en los desafíos y oportunidades que nos esperan.

Aprovechamos para desearle el mayor de los éxitos en su nueva jornada laboral desde donde confiamos en que seguirá aportando a una Patria Nueva desde su amor y rigurosidad por el trabajo.

Con aprecio y gratitud,

Junta de Directores 2024
Asociación de Documentalistas de Puerto Rico (AdocPR)